¿Cómo puedo saber si mi perro se está desmayando o tiene una convulsión?
» Convulsiones o síncope (desmayo) lleve a su perro al veterinario para estar seguro. Si puede obtener un video del episodio, esto es útil para ayudar a distinguir entre los dos», dice la Dra. Kelly Churchill.
¿Qué es el desmayo y cuáles son las razones por las que un perro podría desmayarse?
El desmayo, o síncope, es la pérdida repentina del conocimiento o una debilidad repentina y marcada. Puede estar asociado con numerosas afecciones médicas y puede ser causado por cualquier cosa, desde niveles bajos de azúcar en la sangre y enfermedades neurológicas hasta enfermedades cardíacas graves.
Los problemas neurológicos pueden incluir:
- Convulsiones
- Actividad cerebral anormal
Los problemas cardíacos pueden incluir:
- Ritmos cardíacos anormales (como el síndrome del seno enfermo)
- Bloqueo A-V
- Taquicardia ventricular
- Fibrilación ventricular
El colapso no es desmayo
El desmayo en perros debe diferenciarse del problema más común del colapso. Con el colapso, la pérdida de conciencia generalmente no ocurre, en otras palabras, su perro o gato puede estar débil e incapaz de levantarse, pero aún está consciente. Hay numerosas causas de colapso, incluyendo:
- Deshidratación
- Shock o hipotensión grave (p. ej., presión arterial baja)
- Hemorragia interna o anemia grave
- Insolación
- Problemas neurológicos (por ejemplo, convulsiones)
- Problemas neuromusculares (por ejemplo, botulismo, parálisis por garrapatas, etc.)
- Problemas musculoesqueléticos (por ejemplo, enfermedad de Lyme, problemas articulares, etc.)
- Problemas cardíacos (por ejemplo, arritmias, etc.)
- Problemas endocrinos (por ejemplo, niveles bajos de azúcar en sangre)
- Intoxicaciones (por ejemplo, xilitol, etc.)
- Embarazo
Afortunadamente, algunas causas de desmayos se pueden tratar, pero a menudo requieren terapia más avanzada. Por ejemplo, si se detecta una frecuencia cardíaca anormalmente baja (por ejemplo, síndrome del seno enfermo, bloqueo A-V), a veces es necesario colocar un marcapasos permanente en el corazón para ayudar a estimularlo. Con signos neurológicos graves, también pueden ser necesarios medicamentos anticonvulsivos, dependiendo de lo que indiquen las pruebas preliminares.
¿Qué debo hacer si creo que mi perro pueda tener un episodio?
Qué hacer
- Coloque inmediatamente a la mascota con la cabeza hacia abajo y los cuartos traseros elevados. Esto mejorará el flujo sanguíneo cerebral.
- Cubra a la mascota con una manta para preservar el calor corporal.
- Si la mascota vomita, asegúrese de que no inhale nada del vómito en sus pulmones manteniendo la cabeza agachada.
- Intenta grabar el episodio rápidamente. A menudo, su veterinario o especialista veterinario (por ejemplo, neurólogo, cardiólogo) puede determinar la causa por su apariencia física.
- Busque atención veterinaria inmediata.
Qué NO hacer
- No administrar nada por vía oral. Se puede aspirar a los pulmones y causar problemas graves.
- No abofetees a la mascota ni la rocíes con agua fría para que tome conciencia.
- No deje de buscar atención veterinaria solo porque el animal se recuperó rápidamente y parece estar bien ahora. Varias de las afecciones que causan desmayos o mareos son extremadamente graves y requieren pruebas de diagnóstico para determinar la causa y prevenir episodios futuros.
¿Qué sucede después de llevar a mi perro al veterinario?
Una vez que llegue a su veterinario o veterinario de emergencia, el médico deberá verificar la frecuencia cardíaca en un electrocardiograma (ECG) de inmediato para buscar la presencia de arritmias anormales y realizar análisis de sangre para asegurarse de que no haya causas metabólicas (por ejemplo, hígado, riñón, etc.).) o problemas de azúcar en la sangre que causan el episodio.
Si se detectan problemas neurológicos, se justifica una evaluación adicional por parte de un neurólogo. Es posible que sea necesario realizar pruebas únicas, como un electroencefalograma (EEG), para controlar el cerebro en busca de cualquier actividad convulsiva inusual. Alternativamente, también puede ser necesaria una resonancia magnética o punción raquídea. Si se detectan anomalías cardíacas, puede ser necesario derivar a un cardiólogo para una ecografía del corazón (por ejemplo, un ecocardiograma), radiografías del corazón y un monitor Holter (para controlar el ritmo cardíaco).