¿Cuál es el significado de la Bolsa de Morison?

Varias afecciones pueden hacer que se acumule líquido dentro del abdomen.

Ascitis

La ascitis se refiere a la acumulación de líquido en la cavidad peritoneal. Este líquido también puede filtrarse en la bolsa de Morison, haciendo que se expanda.

El síntoma principal de la ascitis es la hinchazón abdominal visible. Otros síntomas potenciales incluyen:

  • disminución del apetito
  • dolor o presión en el abdomen
  • sensibilidad abdominal
  • dificultad para respirar

El líquido acumulado también puede infectarse, lo que lleva a una afección grave llamada peritonitis bacteriana espontánea. Esto puede causar síntomas adicionales de fiebre y fatiga.

Muchas cosas pueden causar ascitis, pero las más comunes incluyen cirrosis, cáncer e insuficiencia cardíaca.

Dependiendo de la causa subyacente y de su salud general, el tratamiento de la ascitis puede implicar::

  • una dieta baja en sodio
  • drenaje de fluidos
  • trasplante de hígado

Hemoperitoneo

El hemoperitoneo se refiere a la sangre acumulada en la cavidad peritoneal, que también puede entrar en la bolsa de Morison. Puede causar una variedad de síntomas, que incluyen:

  • dolor o sensibilidad abdominal
  • sensación de debilidad o temblor
  • pérdida de color en la cara y la piel
  • pérdida de conciencia

Es causada por una lesión en un vaso sanguíneo cercano, que puede resultar de:

  • lesiones abdominales
  • aneurismas abdominales
  • una abertura en el estómago o los intestinos
  • daño hepático
  • complicación del drenaje de líquido del abdomen
  • acostarse demasiado tiempo en una cama de hospital
  • un ectópico embarazo

El hemoperitoneo se considera una emergencia porque puede convertirse rápidamente en mortal. Si tu médico cree que tienes hemoperitoneo, te realizará rápidamente una laparotomía. Esto implica abrir quirúrgicamente el abdomen para buscar la fuente del sangrado. Luego, drenarán la sangre adicional y extraerán o repararán cualquier tejido dañado.

Con un tratamiento rápido, la mayoría de las personas pueden recuperarse sin complicaciones mayores.

Cirrosis

La cirrosis se refiere a la cicatrización permanente del tejido hepático. Con el tiempo, este tejido cicatricial ejerce presión sobre los vasos sanguíneos del hígado, lo que puede provocar una acumulación de líquido en la cavidad peritoneal y en la bolsa de Morison.

En sus estados iniciales, la cirrosis puede no causar ningún síntoma. A medida que avanza, puede causar:

  • fatiga
  • ictericia
  • pérdida de apetito
  • náuseas
  • hinchazón en el abdomen o las piernas
  • confusión
  • dificultad para hablar
  • aumento de sangrado o moretones
  • pérdida de peso inexplicable
  • crecimiento mamario inusual en hombres
  • reducción de los testículos en hombres

Muchas cosas pueden causar cirrosis, entre ellas:

  • infecciones bacterianas
  • consumo excesivo de alcohol
  • enfermedad hepática grasa no alcohólica
  • hepatitis
  • hemocromatosis
  • ciertos medicamentos

La cirrosis no es reversible, el tratamiento la causa subyacente puede ayudar a ralentizar su progresión. En casos más avanzados, es posible que necesite un trasplante de hígado.