Pseudodemencia
La pseudodemencia es un tipo de deterioro cognitivo que imita la demencia, pero que en realidad ocurre debido a la presencia de un problema de salud mental relacionado con el estado de ánimo, la mayoría de las veces depresión. Esta condición generalmente se observa en personas mayores.
Comprensión de la pseudodemencia
El término pseudodemencia se usó ampliamente después del artículo de Leslie Kiloh de 1961, que describió casos de personas en tratamiento que experimentaron déficits cognitivos similares a los observados en personas con demencia. El deterioro cognitivo experimentado en estos casos se debió en realidad a condiciones de salud mental en lugar de las del sistema nervioso central. Kiloh señaló la reversibilidad potencial del deterioro cognitivo en muchos de estos casos, lo que hizo que el artículo fuera significativo en un momento en que la demencia se consideraba una afección que no se podía revertir.
Algunos profesionales y expertos en el campo argumentan en contra del uso de este término, porque no ofrece criterios claros y objetivos para el diagnóstico y porque el prefijo «pseudo-» puede llevar a la suposición incorrecta de que la demencia no es real. Sin embargo, el término pseudodemencia todavía se considera útil en referencia al deterioro cognitivo que resulta específicamente de la depresión y otros problemas de salud mental, especialmente en el desarrollo de planes de tratamiento.
Distinguir entre Demencia y Pseudodemencia
Puede ser difícil para los proveedores médicos diferenciar entre demencia y pseudodemencia, en parte porque hay una superposición significativa entre los síntomas de cada afección y en parte porque algunas otras formas de demencia, como la enfermedad de Alzheimer y la demencia de la enfermedad de Parkinson, también involucran síntomas del estado de ánimo similares a los que caracterizan la depresión.
Identificar correctamente la afección es un aspecto esencial del tratamiento, ya que el tratamiento de la pseudodemencia, que puede ser reversible, difiere de los enfoques de tratamiento diseñados para otros tipos de demencia, que generalmente son progresivos y a menudo no pueden revertirse. El diagnóstico incorrecto de pseudodemencia como demencia también puede llevar a pruebas y procedimientos neurológicos innecesarios.
Las personas que tienen pseudodemencia son más propensas a ser conscientes de los problemas de memoria y molestarse por ellos, mientras que las personas con demencia pueden negar tener problemas de memoria y/o minimizar la importancia de los mismos.Los tipos de deficiencias de memoria específicas experimentadas, y la respuesta de un individuo a estas dificultades, pueden ayudar a diferenciar entre demencia y pseudodemencia. Las personas que tienen pseudodemencia son más propensas a ser conscientes y molestarse por cualquier problema que tengan para recordar cosas, mientras que las personas con demencia pueden negar tener problemas de memoria y/o minimizar la importancia de ellos. Las personas con demencia generalmente no se desempeñan bien en las pruebas de memoria neuropsicológica, mientras que las personas con pseudodemencia a menudo muestran un deterioro significativamente menor en las tareas que involucran la memoria, incluso cuando experimentan dificultades de memoria.
La Escala de Depresión Geriátrica (GDS) es una medida utilizada para diferenciar entre las dos afecciones, y generalmente es la más útil cuando se combina con información sobre la historia y el funcionamiento actual de un individuo. En el GDS, las personas con demencia pueden mostrar una gama más amplia de emociones y también pueden mostrar emociones que no son congruentes con la situación: reír durante un evento sombrío, como un monumento conmemorativo, por ejemplo.
Signos, Síntomas y Factores de riesgo
La pseudodemencia generalmente involucra tres componentes cognitivos: problemas de memoria, déficits en el funcionamiento ejecutivo y déficits en el habla y el lenguaje. Los síntomas cognitivos específicos pueden incluir problemas para recordar palabras o recordar cosas en general, disminución de la atención y la concentración, dificultad para completar tareas o tomar decisiones, disminución de la velocidad y la fluidez del habla y disminución de la velocidad de procesamiento. Las personas con pseudodemencia suelen estar muy angustiadas por el deterioro cognitivo que experimentan.
Las personas con pseudodemencia pueden experimentar síntomas como retraso en la respuesta motora, ansiedad y sentimientos de impotencia y desesperanza. Es más probable que se despierten temprano y no puedan dormir, y también es probable que experimenten otros síntomas de depresión. Estos síntomas pueden incluir:
- Un estado de ánimo bajo y deprimido
- Fatiga o disminución de la energía
- Insomnio o hipersomnia (sueño excesivo)
- Pérdida de interés en las actividades
- Comer en exceso o pérdida de apetito
- Pensamientos de suicidio
Los factores de riesgo de pseudodemencia son muy similares a los de depresión. Entre ellos se encuentran el género (las mujeres son estadísticamente más propensas a desarrollar depresión), los antecedentes familiares, el divorcio y el estatus socioeconómico más bajo. Las personas de todas las edades pueden desarrollar depresión, pero la pseudodemencia generalmente se observa en adultos de mediana edad o mayores. Algunos investigadores han sugerido que la pseudodemencia puede ocurrir cuando se desarrolla una afección relacionada con el estado de ánimo en un cerebro que ya está algo comprometido debido a la edad avanzada.
Tratamiento para la pseudodemencia
El tratamiento para la pseudodemencia se solapa con el tratamiento para la depresión, y los síntomas generalmente mejoran si la depresión se aborda con éxito y el estado de ánimo de una persona mejora. En muchos casos, el funcionamiento cognitivo se puede recuperar por completo. El tratamiento para la pseudodemencia puede incluir terapia, medicamentos como antidepresivos o una combinación de ambos.
La terapia cognitivo-conductual y la terapia interpersonal son dos tratamientos específicos que han demostrado ser eficaces para el tratamiento de la depresión, y estos tratamientos también pueden ser beneficiosos para el tratamiento de la pseudodemencia. La terapia cognitiva conductual (TCC) implica explorar y cambiar los patrones de pensamiento y los comportamientos para mejorar el estado de ánimo. La terapia interpersonal se centra en la exploración de las relaciones de un individuo e identificar cualquier forma en que puedan estar contribuyendo a los sentimientos de depresión.
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Última actualización:10-12-2016