¿Qué es el Amor Puro?
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Puro amor significa no querer nada.
El amor puro no se puede dar, solo puede ser compartido por dos seres de igual intensidad pura, cuando dos individuos no comparten el mismo amor puro, esa calidad de intercambio se convierte en una necesidad de ayuda, simpatía, consuelo, aprobación, confirmación o sensación de seguridad, etc. por el cual uno (el que da) llena para siempre un pozo sin fondo en el otro (el que recibe), con el llamado amor.
El amor puro no espera nada.
El amor puro no exige. El amor puro es natural, amable y liberador.
En el amor puro estoy desapegado, lo que significa que no me afecta el resultado. Estoy desapegado desde el principio not no me aferro a nada. Dejo ir y acepto a la persona o la situación.
Tener amor puro significa acercar a los demás a sí mismos y a su verdad interior.
Amor puro significa mantener la actitud y visión más elevadas para cada alma.
El amor de Dios es el más puro. No mide su amor, ni amor los martes y jueves no! Su amor es constante y verdaderamente altruista. Aunque no podemos ser Dios, podemos aprender que el amor divino tiene que ser de la misma medida – puro, constante y desinteresado
– Amor Puro » Medios de Confluencia.
Dos años y muchas epifanías después, estoy en un punto de paz. Me tomó pasar por una angustia total y absoluta para entender lo que sentí y lo que compartí en esos dos años y ocho meses. No mentiré y diré que no fui egoísta ni celosa ni posesiva ni dependiente durante ese tiempo. Mi amor tuvo que cometer errores y aprender. Y es a través de esas lecciones que creció más. Creció sin mi conocimiento y cuando mi corazón se rompió, fue cuando realmente me di cuenta de la profundidad de ese amor.
Los dos años transcurridos desde entonces han sido una lucha constante. Una pelea por mi amor. Una lucha para no rendirse sin importar lo que el mundo diga ni lo que yo vea. Viví como me sentía, y nunca me llevó por mal camino. No me arrepiento de haber derramado una sola lágrima, ni tampoco me arrepiento de haber abrazado todo el dolor.
Finalmente me di cuenta de que mi amor existía sin necesidad. Se mantuvo firme sin expectativas. No se usaba sin apego. Me llevó tiempo aceptarlo y entenderlo. Y aunque hay momentos en que estoy perdido y no lo entiendo. El amor está en paz. Estaba en paz cuando había dudas sobre si era compartida o solo de mi parte. Aceptó que dejarlo ir era para su felicidad; y estaba feliz de poder darle esa felicidad de cualquier manera posible.
Y anoche sentí su forma más pura. Mientras compartía lo felices que su familia y él están ahora y lo fuerte que se ha vuelto su vínculo. Lo único que sentí fue felicidad por él. En ese momento, me di cuenta de que nunca podría pedirle algo que temía que se interpusiera en el medio de eso. En ese momento, no pude encontrar ninguna cantidad de importancia para lo que quería preguntarle. Todo lo que sentí fue amor por él y cómo haría cualquier cosa por su felicidad. Mi amor sería una mentira egoísta si siguiera y sugiriera lo que me había dado cuenta en los últimos días. Pero mi amor no lo exige. Es liberador.
Aunque la idea de pasar por la vida sin poder compartir mi amor con él me rompe el corazón, para su felicidad, mi amor no quiere. No lo espera. Es constante. Es fuerte. Y lo es.